FERRAN MARTÏNEZ – 18/10/2004
Juan Carlos Navarro cumplió ayer su partido 250 en la Liga ACB con 24 años. Y Sergio Rodríguez, con sólo 18, apareció como la nueva estrella de la competición, convirtiendo un partido extraño y de claro dominio azulgrana hasta el tercer cuarto en un duelo igualadísimo, con prórroga incluida, y que se decidió en los últimos instantes. Navarro debutó cuando tenía sólo 17 años, precisamente con Montes como entrenador, y ahora ya es una estrella consagrada tanto en el Barcelona como en la selección española.
Ayer Sergio Rodríguez se puso todo el equipo del Estudiantes a sus espaldas y tomó las decisiones adecuadas en cada momento, pidiendo continuamente bloqueos directos para desequilibrar a su defensor, utilizando toda su explosividad y gran técnica individual con el mismo descaro que Navarro o que la otra nueva estrella de la Liga, Rudy Fernández. Sergio fue el revulsivo en un partido de tanteo muy bajo en el que las virtudes del nuevo Barça de Joan Montes (mayor libertad para sus jugadores) permitieron al equipo mantener unas ventajas de entre cinco y diez puntos.
El Estudiantes planteó a partir del segundo cuarto unas defensas alternativas: zona e individual. En el tercero, con la irrupción de Sergio Rodríguez, el equipo madrileño remontó. Tras una canasta de Sergio que parecía decisiva, Ilievski cruzó la pista y anotó desde 6 metros para forzar la prórroga. En ésta, el Barça se impuso una vez más por su experiencia y acabó ganando un partido muy complicado.